Soy madridista a tope y no se puede consentir que este joven deportista, Vinicius jr, nos tache de racistas a los españoles.
Si a esto le añade la amenaza de que «si España no evoluciona» se le debe retirar la celebración del mundial del 2030 de fútbol y como consecuencia la posibilidad de que la final se juegue en el estadio de su club el Real Madrid, resulta inadmisible la inoportunidad y torpeza de sus declaraciones.
Declaraciones que además las realiza a un medio de comunicación en EEUU, país especialmente poco adecuado para señalar a cualquier otro de actitudes racistas y menos aún a España. Que en algunos estadios haya energúmenos con gestos y palabras ofensivas y racistas es además de condenable, perseguible por la justicia y por los propios clubs, pero que ponga en entredicho a España y perjudique gravemente al Real Madrid que le da de comer y disfrutar de una posición muy privilegiada económica y socialmente es absolutamente rechazable. El presidente Florentino está obligado a tomar medidas por el perjuicio que sus palabras han causado a España y a su Club.